Actualmente la Formación Profesional está tomando cada vez mayor protagonismo entre muchos de los jóvenes que empiezan a labrarse un futuro profesional, pero no siempre ha sido así. Hace unos años la Formación Profesional quedaba relegada a los estudiantes con menor interés o a aquellos que no estaban dispuestos a acceder a estudios universitarios superiores, socialmente era tratada como la opción de menor prestigio. Afortunadamente esta concepción está cambiando y son muchos los que eligen la FP siendo conscientes de que es lo que quieren para conseguir el futuro profesional que imaginan. Vamos a ver cómo ha evolucionado, con el paso de los años, esta percepción de la que estamos hablando.
La evolución de la Formación Profesional
La formación profesional se entiende de forma diferente, dependiendo el país en el que nos encontremos. En España, lamentablemente, no ha sido hasta hace unos pocos años cuando esta ha comenzado a ganar prestigio y posicionarse como una opción más de formación para conseguir un futuro laboral de calidad.
Los comienzos de esta no fueron buenos, pues siempre estuvo enfocada, durante muchos años, a aquellos estudiantes que decidían no estudiar o no involucrarse en su formación. Esto desencadenó la situación de inestabilidad que se encuentra en muchas de las clases de ciclos de formación profesional, donde alumnos interesados en la materia y con grandes capacidades están mezclados con alumnos que no tienen el mínimo interés en los conocimientos que están recibiendo.
Esta ha sufrido varios cambios hasta llegar a lo que todos conocemos como “Formación Profesional”. Para empezar se crearon en el siglo XIX, las Escuelas de Artes y Oficios, más tarde en 1857 la Ley Moyano promulgaba la creación de las llamadas Enseñanzas Especiales y finalizando el siglo XX se instauró la Ley de Aprendizaje Industrial. Todo este periodo dio lugar a que en 1928 se promulgase el Estatuto de la Formación Profesional, considerado en sus tiempos como la norma que cubría las necesidades de una verdadera formación profesional institucionalizada.
30 años después de instaurar el Estatuto de la Formación Profesional, los cambios políticos y la guerra civil española obligaron a reestructurar este nivel educativo afectando a centros, alumnado, órganos de gobierno, profesorado… desencadenado en 1955 la publicación de la Ley Orgánica de Formación Profesional Industrial.
En 1970, llegan nuevos cambios al sistema educativo y se promulga la Ley General de Educación. Esta ley afectaba a la Formación Profesional estructurándola ya en tres niveles: Formación Profesional de Primer Grado, Formación Profesional de Segundo Grado y Formación Profesional de Tercer Grado. Este nuevo cambio perseguía el objetivo de enfocar la formación profesional a la preparación del estudiante para la vida laboral. Aunque hecha con muy buena intención, sus grandes presupuestos hicieron que muchas de las propuestas nunca se llevaran a cabo.
Panorama actual de la Formación Profesional
Actualmente han sido dos las leyes publicadas, a nivel educativo, que han afectado al desarrollo de esta formación, estas han sido la LOGSE y la LOE que sometieron la formación profesional a varios cambios, entre ellos a la división de la Formación Profesional, en tres niveles de educación, tal y como la conocemos actualmente.
- Formación Profesional Básica
- Formación Profesional de Grado Medio
- Formación Profesional de Grado Superior
Por otro lado se encontrarían los Cursos de Especialización, estos acreditan los conocimientos específicos en determinadas actividades.
Formación Profesional Sanitaria
La sociedad, tal y como la conocemos ahora mismo, se ha convertido en un mero producto de la globalización y como tal está sometida a transformaciones sustanciales económicas, políticas, sociales e incluso productivas. La Formación Profesional ofrece estudios para reforzar cualquier sector de la sociedad y en el caso del sector sanitario puede ayudar a mejorar la situación de los estudiantes, las empresas y por lo tanto a la propia sociedad.
- Los estudiantes, convertidos ya en trabajadores, se benefician de la formación profesional y esto es así ya que en la actualidad, prácticamente, toda la demanda laboral precisa la incorporación de técnicos sanitarios. De este modo tras finalizar sus estudios incrementan la productividad y mejoran su nivel de vida.
- Las empresas son sin duda una de las partes más beneficiadas. En la actualidad no se requiere tanto personal con estudios superiores, por ello la mayoría de los Centros Hospitalarios precisan la incorporación de técnicos en radioterapia o dosimetría o técnicos en imagen para el diagnóstico, radiodiagnóstico, para cubrir las vacantes que van surgiendo.
Es así como la sociedad consigue beneficiarse de utilizar mejor el recurso humano, dando cabida a las necesidades que se solicitan. Por lo tanto la FP se instaura como la herramienta de fomento para la empleabilidad, ya que prepara al profesional para cumplir con la actividad para la que ha sido educado. De este modo se conseguiría un progreso social a todos los niveles y en todos los sectores, ¿sigues pensando que la FP no es una solución de futuro válida?
