
Si nunca se ha escuchado hablar de la FP dual, un sistema educativo de reciente implantación en España, conviene conocer las modificaciones que introduce con respecto a la Formación profesional tradicional. Es interesante destacar, como primer punto, que este método enriquece tremendamente el estudio y el aprendizaje de cualquier carrera de FP, aunque favorece especialmente a las ramas de la salud, como se verá a continuación.
La FP dual, como sugiere su nombre, ofrece al alumno una doble preparación, que consiste una fase de preparación teórica impartida por un centro de formación, que constituye los 2/3 del total de la carrera, y un espacio práctico, correspondiente al tercio de tiempo restante, que se desarrolla en distintas empresas. Lo normal es que estas entidades paguen una remuneración a los estudiantes, aunque su compromiso no implica darles el alta en la Seguridad Social. Este sistema tiene una exitosa aplicación, verdaderamente generalizada desde décadas atrás, en países como Suiza, Alemania y Austria. En el plano de las carreras sanitarias, el contacto real con pacientes favorece que los alumnos reciban una formación de mayor calidad, por lo que al finalizar sus estudios se insertan con mayor facilidad en el mercado laboral, tanto por los contactos generados en su trabajo de aprendizaje como por su auto-confianza.
Un informe del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte revela que el sistema dual es, mayoritariamente, elegido por alumnos que estudian un ciclo de FP de grado superior. Además ofrece datos interesantes acerca de los porcentajes de alumnos registrados en cada forma de estudio de Formación profesional válida en el territorio nacional. Actualmente en España el porcentaje de alumnos que optan por la FP dual, en la cual se desarrolla una co-participación de centros formativos y empresas, alcanza al 57% del total, frente al 4% que se forma únicamente en centros de estudios, el 11% que lo hace en una empresa autorizada con un complemento en centro de formación y el 28% que estudia en un centro de formación y luego hace una reducida práctica en empresas.
El caso es que desde hace tres años la evolución del número de alumnos que prefiere la FP dual viene creciendo en forma exponencial, principalmente en los datos comparativos de los dos últimos años. La cantidad de alumnos matriculados en el período actual supera en un 200% a los que lo hicieron el año anterior, índice que demuestra los excelentes resultados obtenidos. Es verdad que en un principio, al implantarse el sistema en el país, existió bastante reticencia, lógica frente a los cambios, pero hoy se ha superado esa etapa, dada la experiencia recabada en esta forma de estudio.
El sistema de FP dual requiere de una múltiple implicación, primeramente de los alumnos y de los centros de formación, como el Centro de Estudios del Mediterráneo (CESM), comprometidos con la excelencia en formación superior. Además resulta imprescindible la labor del sector empresarial a este respecto y, en un nivel de importancia equivalente, el de las Comunidades Autónomas. En la actualidad son 17 las Comunidades en las que se accede a la FP dual, frente a las 14 que lo implantaron en el período anterior. El mayor porcentaje de carreras de FP dual está relacionada con la industria, aunque en el sector servicios como sanidad, comercio, turismo y banca, sus beneficios resultan evidentes y el método se extiende con firmeza.
